En el siguiente ejercicio vamos a trabajar la posición correcta de la mano izquierda y la independencia de cada uno de los dedos. Además, al tener que repetir continuamente el dedo 4 (meñique), evitarás el error común de que se "escape" demasiado del diapasón.

Dentro de la técnica de la mano derecha, los arpegios son un apartado fundamental de estudio. Aunque se trata de una técnica que se utiliza en diversos estilos musicales, es en el mundo de la guitarra clásica donde alcanza todo su esplendor. 

Conseguir una mayor independencia de dedos es fundamental a la hora de tocar la guitarra. Y es que solamente el pulgar y el índice son completamente independientes anatómicamente hablando.

Una de las máximas en la técnica de guitarra clásica es la de economizar movimientos o, dicho de otra manera, tocar con el mínimo esfuerzo. Si te fijas, en general, los guitarristas con mejor técnica parecen que tocan casi "sin hacer nada". Y es que la economía de movimientos es uno de los factores más importantes para conseguir precisión y velocidad.

Una vez qué sabemos cómo se hace un ligado ascendente y descendente, el siguiente paso es combinarlos o, dicho de otra manera, ejecutar un ligado mixto. En esta lección te propongo tres ejercicios técnicos para practicarlos y conseguir una destreza en esta técnica de guitarra.

Con el término ligado podemos referirnos a:

• Signo de articulación representado mediante una ligadura de expresión que indica que esas notas deben interpretarse sin articular una separación entre ellas mediante la interrupción del sonido.

Tocar la guitarra implica una gran coordinación entre las dos manos. Mientras la mano izquierda se encarga de pulsar las notas, la derecha es la que produce directamente el sonido. De ella depende la calidad, el volumen, el timbre y la variedad de sonoridades que el guitarrista puede extraer del instrumento.